Sólo brotan ideas en mi cabeza.
Pensamientos que me golpean.
No se siquiera si son verdad
o si pueden llegar a hacerse realidad
o si solo se quedaran ahí,
en mi imaginación
donde yo creía ser el dueño de mi mundo de fantasía.
Pensamientos que surgen como conversaciones,
charlas en las que hablo solo conmigo mismo
discutiendo mis actos,
imaginando momentos alternativos para negar la verdad.
Pienso que hacer sin llegar a hacerlo.
Pienso que decir sin llegar a decirlo.
Pienso como llevar mi vida
sin ser capaz de sacarlo de lo que es: un mero pensamiento.
No puedo hacer más que pensar,
no pienso nada útil para mi realidad
porque no consigo solucionar los problemas,
problemas que hacen fluir esas ideas sin fin.
Sueños rotos, sueños deseados,
deseos incontenibles, deseos apasionados,
pasiones necesitadas, pasiones cumplidas…
Pienso, sueño, imagino, deseo, no cumplo, no consigo…
Me vuelvo loco cuando me atrevo a realizar los pensamientos,
me vuelvo loco cuando hago algo que no pienso,
me vuelvo loco continuamente al no poder llevar a cabo lo que ocurre en mis fantasías,
me vuelvo loco sino dejo de pensar.
Sólo alcanzo las ilusiones en mi cabeza.
Solo estoy en mi cabeza.
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